Extraño verte moverte con el viento de esa manera que solo tú sabes, extraño oír tu voz, verte reír, que toques mi cabello con la dulzura que habita entre tus dedos, que te duermas entre mis brazos, que me des esos abrazos de oso.
Que roces mi piel con la tuya, que me acaricies con tu suaves manos, que me hagas esas cosquillas en la nariz, te extraño a ti.
Aguantando con la emoción de la vibración del celular al recibir ese mensaje de texto tuyo, con las sonrisas ciegas que le doy a la pantalla de un computador al hablar contigo, con las noches en que me llamas y te escucho antes de dormir, aguantando con esa firme esperanza de tenerte enfrente un día de estos, con esa fe que solo el amor puede dar, aguanto porque te amo.
Viendo el cielo, porque recuerdo cuanto recién te conocía y solía verlo y decirte que me hacia sentirme cerca de ti porque debajo de él, en alguna parte, estarías tú también.
Aún admiro las estrellas y la luna desde mi ventana cada noche.
Voy a la parte trasera de mi casa a sentarme en esa hamaca donde siento la brisa del viento como dulces palabras que me sueles decir al oído.
Y es que todo lo que hago día a día solo me recuerda a ti.
Dedicaria mi vida entera a encontrarte estés donde estés...
1 comentario:
bonito texto, pero a veces esperar, no sirve de mucho :S
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